Eh eh epa Colombia Ya dejó de ser solo un fragmento de la vida de una joven colombiana de 19 años, que con su celular abrió una ventana al mundo virtual con el estribillo “Eh eh epa Colombia”.  Y el mundo le devolvió la mirada.

El “documental”, como la espontánea youtuber llamó a su video, a esta altura ya ha superado las 10 millones de reproducciones en Facebook, Twitter, Youtube y demás redes sociales. Eso entre vistas del video original y las parodias que le han hecho.

En este escenario de ‘boom’ viral, Colombia se dividió en dos bandos. Entre quienes la apoyaron y quienes la criticaron muy duramente. Pero pese a que a muchos no les pareció que Daneidy Barrera, más conocida como ‘Chamitha Cheers’ era un buen contenido que valía la pena compartir y alabar, lo cierto es que el “eh eh epa Colombia” ya está en otro nivel.

“Eh eh epa Colombia” trascendió al punto que su autora ya se volvió protagonista de un video con producción, letra propia, mezcla, edición y masterización, tal como suelen hacerlo los artistas emergentes o de largo recorrido en el vertiginoso mundo de la industria musical.

Ni la fatiga que pronto desencadena la alta exposición de estos contenidos en internet ni la probabilidad de una derrota de la Selección Colombia en la Copa América han detenido al “eh eh epa Colombia”. Era una producción que no podía esperar tanto.

Por eso, en cuestión de 10 horas, Jonatan Clay, animador, modelo, realizador audiovisual, músico, que no es tan conocido en la tele pero sí en la web, dirigió la grabación en la que Daneidy es la protagonista al interpretarse a sí misma, mientras que Eduard Tremendo, joven humorista, famoso youtuber, hace las veces de antagonista.

El video fue lanzado en las redes la noche que Colombia se enfrentó a Perú. En tres días alcanzó los 2 millones y medio de visitas en YouTube y Facebook sin contar con un segundo video al que Clay le hizo unos arreglos en asuntos de sonido que ha sobrepasado las 166 mil vistas en ambas redes.

“Es una especie de composición  tropi-electro, que se usa para darle más fuerza a las arengas, a los contenidos triunfales. La idea era divertir a la gente con las situaciones jocosas pero ante la ola de comentarios negativos contra Daneidi, le di la vuelta. Lo volví entonces un video oficial”, cuenta Jonatan Clay, quien asegura que su interés no obedece a razones propiamente económicas pues YouTube le ha pagado 18 dólares hasta el momento por la difusión de este trabajo.